Por qué debería nadie transfigurar su cara en algo completamente antinatural? Se abre así una reacción en cadena. Tras cuatro o cinco intervenciones uno se convierte en un extraño”. Quien dice esto es nada más y nada menos que Cameron Diaz, una de las mejor pagadas de Hollywood y presencia habitual en las listas de las mujeres más deseadas del planeta. Ella es una de las tantas bellezas que no necesitaron siliconas para ser espectaculares y triunfar, una de las tantas que enumera Fox News.com.
Más allá de una genética privilegiada, su gusto por la práctica del surf ha ayudado a Cameron a mantener una escultural y envidiable figura, que por supuesto, no requiere ninguna ayuda de la cirugía. La actriz, que ha cumplido ya los 37, tampoco piensa en borar quirúrgicamente el paso del tiempo: “Nadie debería intentar aferrarse a las cosas que son pasajeras. Yo vivo el ahora”, asegura.
Tampoco a Kate Moss tener lolas escasas le ha impedido convertirse en una de las top models internacionales más famosas. De hecho, son pocas las firmas que no la han solicitado alguna vez como imagen. Además, su pecho casi plano nunca le acomplejó, por eso cada verano aparece algún topless de ella en las revistas.
Otro buen ejemplo de que la belleza natural se impone a los artificios es Sienna Miller. La hermosa actriz, de 27 años, que acumula éxitos, tanto en cine como en la moda- su última campaña publicitaria fue como imagen de la fragancia Boss Orange, de Hugo Boss- no sólo carece de curvas plásticas sino que apenas se maquilla.
En el caso de Keira Knightley, sin duda, la chatura de sus senos tiene mucho que ver con su delgadez extrema. Aunque Knightley siempre ha negado tener un trastorno alimenticio, con o sin él, la falta de escote abultado le impidió trabajar como modelo para Chanel, aunque en este caso, la firma no dudó en hacer uso del Photoshop.
Por su parte, Debra Messing, la actriz de Will & Grace, entre otras, es una firme militante en contra del bisturí. De hecho, Messing se ha unido a un grupo que lucha contra la presión social que lleva a muchas mujeres a aumentar su pecho. La bella pelirroja siempre se ha tomado con humor el tamaño de su delantera, tanto en la alfombra roja como en las series que la han lanzado a la fama. Ella es una mujer que se siente feliz con su físico y, como todas las demás que aquí se mencionan, razones no le faltan.
Y, para concluir, un dato nada menor : a ellos no les da igual. Por lo menos, no a todos. El año pasado, George Clooney dejó , tras un año de relación, a su novia de 29 años, enojado porque ella hizo caso omiso a sus consejos y decidió operarse para aumentarse el pecho. Otro que le viene dando el ultimátum de “ No más cirugías” a su mujer es Antonio Banderas. Dos bombones que, por lo visto, las prefieren cortadas por la tijera de la Madre Naturaleza.
Fuente: http://cm1.theinsider.com
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